Probando una Honda Transalp con Ruedas Mixtas

Ya hacia años que me había fijado en este modelo, cuando aun montaba en una custom. Pero, por aquel entonces, me parecía una moto muy alta y lejos de mis posibilidades. Ha sido muchos años después, planteándome darme una vuelta al mundo en una moto, en una Honda Dominator, cuando de labios de un amigo ha vuelto a venirse este modelo a mi mente, la Honda Transalp, un motor bicilíndrico con bastante potencia en una moto trail con suficiente recorrido de suspensión y altura libre al suelo.

Los dos modelos son Honda, de carburación y mecánica sencilla, y de 650cc* y rondan los 40-50HP, las mayores diferencias son, los casi 20 o 30 kilos de diferencia en peso en vacío, la capacidad de su deposito de combustible, con un saldo positivo a favor de la transalp (3-4 litros más), que una es bicilindrica (Transalp) y la otra monocilindrica (Dominator) y, que el carenado y cúpula de la transalp ofrecen una protección mayor, pero dificulta el acceso a su mecánica.



Así que, antes de comprar una, habrá que probarla. Hablo con Iñaki, un fenómeno de persona que, sabiendo la que le puede caer a la moto siendo probada por mi, me la deja con gusto, con ruedas mixtas recién cambiadas y que yo mismo fui al taller a que se las pusieran y con un fin de semana mojado, por delante. Iba a ser una buena prueba para ver si me hacia con ella o nos hacia trizas.

Sábado a la mañana, amanece nublado, frío, pero con el asfalto seco en Bilbao. Hemos decidido ir Gosia y yo en la moto, ya que planteamos hacer el viaje a dúo en una sola moto y va a ser mejor probarla así. Iremos hasta Castro-Urdiales por autopista para probar la conducción rápida y si protege suficiente el carenado que lleva conduciendo a altas velocidades y, si a esas velocidades, me permitiría llevar un casco de tipo cross. Luego, de ahí, entraremos por pistas sencillas, con no demasiado barro, para ir probando las inercias y agarre de las ruedas mixtas en diferentes superficies y para ver si la moto resulta demasiado pesada en conducción off road.

Al llegar a Castro ya nos ha resuelto las primeras dudas: La transalp funciona mucho más fina, con menos vibraciones, menor retención en las reducciones y mejor aerodinámica, además de dar una mayor protección gracias a su carenado y su cúpula. Incluso subiendo la velocidad hasta los 130 kms/h no me produce vibración ninguna en el casco de cross.

Salimos de la autopista, ahora nos tocará probar la conducción por pistas hacia Trucios y, ya de paso, probaremos el Garmin gpsmaps64S que hemos comprado para iniciarnos en el uso de este tipo de dispositivos que usaremos también en el viaje.

Vamos acostumbrándonos a las marchas y al agarre de las ruedas de la pista cuando, casi nada más empezar, nos encontramos con barro. Ni de lejos tiene el agarre del taco al que estoy acostumbrado. En recta ya se ve que puede andar sin demasiado problema ya que no es un gran barrizal, sin embargo en curva se nota desliza y hay que conducir con mucha suavidad. Bueno, aun así, nos permite pasar algunos obstáculos con facilidad, pese a que se deslice y haya que gestionar con seguridad y contundencia el gas.

Una vez pasada la zona de barro, ascendemos por pistas sin problema; se nota que aun no tengo el tacto cogido a la moto, sube sin problema, pero me da la sensación de que le falta fuerza en segunda para coger curvas cerradas en ascensión, cosa que no me pasaba en la Dominator. Pero me da la sensación que es más cosa mía que de la moto.

Por el camino vemos endureros... y monatañas nevadas.

Bueno, acabamos el primer tramo de pistas en Truzios, pero me da la sensación que aun necesito probar un poco más esas ruedas, ahora que ya me voy haciendo a la relación de marchas. Cogemos la pista que lleva desde Truzios hasta El Suceso (Karrantza). Es una pista ancha, con superficie de tierra y piedra y hoja de pino, con algunos pasos de agua longitudinales de tierra que nos permitirá probar el agarre de las ruedas en curva en diferentes grados de cierre de curva y sobre varias superfecies. Sobre piedras y sobre hoja de pino, tumbando la moto y abriendo gas... se va de delante. Así que no permiten mucho juego ni alegría las ruedas mixtas. Pero, sin embargo, aun así permiten un ritmo de crucero bueno en general. Las suspensiones, aunque con un ligero menor recorrido que las de la Honda Dominator, parece que las han mejorado sustancialmente en esta moto. No nos hacen tope en ningún momento y, además, son más duras.

Desde el Suceso, en el valle de Karrantza, vamos a volver hasta la zona de Truzios por nacional, para probarla en curvas sencillas por asfalto; desde donde cogeremos un ultimo tramo de pista que nos llevará hasta Trebueso, para coger la nacional hacia Ampuero y probar la moto en curvas enlazadas yendo un poco más fuerte. En ese último tramo de carretera de curvas enlazadas, lo único que le notamos a la moto es que tan solo tiene un disco delantero y no me gusta la sensación de frenada. Sin embargo, este problema no lo encontramos en el modelo de transalp que andamos mirando para el viaje, ya que viene con doble disco delantero y con un chasis más rígido, lo que se debería notar en estos casos. Y, en todo caso, en la comparativa con la Dominator, quedan a la par, pues ambas tienen un solo disco delantero.

De Ampuero, tan solo nos toca la ultima prueba del día, ver si somos capaces de acabarnos el menú del restaurante de enfrente de la hermita del pueblo. Impresionanate lo bueno que está todo y la cantidad de comida que ponen por 10 euros. Un sitio muy recomendable con una gran servicio. Muy majas las camareras y con una paciencia increíble.

Al final del día, con esta pequeña prueba de 200 kms en 4 horas de conducción. Se ve una diferencia notoría entre ambas motos. Con la Dominator, o cualquier otra trail ligera de ese tipo y características similares, puede meterse por sitios más complicados y te permite hacer más el bestia, pero para un viaje al rededor del mundo parece mucho más fiable, segura y cómoda la transalp. Porque, no nos engañemos, pese a que habrá sitios con carreteras muy rotas, pistas muy rotas o, incluso, en sitios en los que no sean más que barrizales, la mayor parte del tiempo se conduce entre carreteras y pistas anchas y buenas. Con lo que una moto más apta para estas gana muchas puntos respecto algo más off road. Sobre todo, teniendo en cuenta que en un viaje a dúo, tampoco podremos aventurarnos por los sitios más complicados y, además, necesitaremos mayor capacidad de carga en la moto, pues llevaremos más equipaje que en un viaje en solitario.

En cuanto a las pruebas con el GPS: bueno, hemos conseguido seguir una ruta que bajamos del wikiloc con facilidad y luego hemos trackeado el tramo de Truzios al Suceso:

* El modelo que nos han dejado para probar es la Transalp 600V y el modelo que queremos llevar es la XL650, es algo más nuevo y con ciertas mejoras, pero para ver las diferencias entre los modelos mencionados nos sirve.